Es una obra de mármol. En ella quiere mostrarnos el espíritu combativo del barroco. Elige el momento en que David va a atacar al gigante Golliat, estando todo su cuerpo contraído, con unos músculos en completa tensión, con lo que demuestra el perfecto conocimiento que posee de la anatomía humana. El cuerpo se llena de energía y movimiento, pero es sobre todo en su rostro donde mejor se aprecia la energía del momento, con mirada violenta, mordiéndose el labio superior, los ojos fruncidos, la barbilla en tensión y el resto de sus músculos que también poseen mucha tensión. Su David es de dimensiones humanas, empequeñecido en su condición de mortal en la que radica su hermosura.
(No encontré mucho más de esta obra, pero me llamó la atención ya que es parecida al David de Miguel ángel, en otra época y para mi opinión menos elaborado).
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